Según algunas investigaciones, la búsqueda de crecimiento profesional suele ocurrir entre los 28 y 35 años ya que después algún tiempo ocupando la misma posición o bajo cierta rutina surge el deseo de avanzar en el proceso de aprendizaje.

Este proceso no ocurre de la noche a la mañana, más bien es un conjunto de estrategias, esfuerzo y disciplina que se deben trabajar día con día con base en el objetivo deseado. De inicio es importante entender que el crecimiento no es igual para todos: mientras algunos buscan desarrollarse en una posición con mayores retos y responsabilidades, otros orientan su interés hacia el desarrollo de nuevas habilidades, la expansión del conocimiento o nuevas enseñanzas en distintas áreas.

Si dentro de tus objetivos está lograr este crecimiento dentro de la organización en la que te encuentras, te compartimos algunos aspectos a considerar para alcanzarlo:

• Asumir tu responsabilidad: Es fundamental demostrar ética y compromiso con las tareas asignadas, así como la disposición de apoyar al equipo de trabajo. No es ideal hacer uso del “no me informaron” o “no lo sabía” para evadir el cumplimiento de alguna actividad dentro de tus alcances.
• Sin miedo al cambio: Para alcanzar un alto nivel es necesario asumir nuevos desafíos y salir de la zona de confort, las mejores oportunidades tienen dificultades y retos a superar, ningún líder ha llegado al éxito utilizando siempre la misma fórmula.
• Preparación: Para dirigir un grupo de trabajo se deben conocer los procesos y la operación del área. La capacitación continua es parte fundamental en el desarrollo profesional.
• Iniciativa: Levantar la mano, proponer ideas o conseguir un proyecto son acciones para no pasar desapercibido en las que, además, puedes demostrar las capacidades y habilidades obtenidas así como establecer relaciones con los compañeros de trabajo.
• Comunicación efectiva: Saber expresar las ideas con claridad es algo básico para un líder, mantener una sincronía con los miembros del equipo es una habilidad que se debe desarrollar para trabajar de la mejor manera.

Realizar un autoanálisis para evaluar estos puntos e identificar tus áreas de mejora permitirá definir un plan de acción y alcanzar ese crecimiento que buscas. Recuerda que llevar mucho o poco tiempo en una organización no necesariamente es significativo para ello, pues influyen diferentes variables.

Como lo mencionamos antes, no es un proceso que ocurra de manera fortuita sino que implica una labor diaria de trabajo también a nivel personal, que conlleva responsabilidad y toma de decisiones orientadas a obtener el resultado deseado.

¡Es el momento de empezar a crecer profesionalmente!

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